El financiamiento que ofrece un banco a través de una Tarjeta de Crédito herramienta útil para tus finanzas, pero puede ocasionar una deuda que pareciera imposible de liquidar.
Si eres de las personas que por más que pague no ve mejora en sus finanzas, en este artículo te decimos cómo pagar tu tarjeta de crédito y cuáles métodos disponibles existen y lo que conlleva elegir cada uno de ellos.
Suscríbete a nuestro canal en YouTube ☝️
¿Qué hacer si ya no puedes pagar tu Tarjeta de Crédito?
Si estás pensando en cómo pagar Tarjeta de Crédito lo peor que puedes hacer si adeudas uno o varios plásticos es no actuar.
El tiempo es oro en estos casos, entre más rápido entiendas el problema tendrás mejores resultados.
Una deuda puede pagarse de diferentes maneras, por tu cuenta o con la ayuda de instituciones como las reparadoras de crédito, de las que hablaremos más adelante, y en cualquier opción que elijas debe existir un plan de batalla para pagar tus tarjetas de crédito.
¿Cómo se liquida una Tarjeta de Crédito más rápido?
Si estás decidido a liquidar tu tarjeta encontrarás cuatro estrategias para hacerlo más rápido y por tu cuenta. Aquí te explicamos las ventajas y desventajas de cada una.
1. Método de la Avalancha
Si quieres resultados rápidos y pagar menos intereses, esta es tu opción, pero ojo: es para usuarios que estén dispuestos a ser sumamente disciplinados en sus pagos, sobre todo si te urge liquidar tus deudas.
Si aceptas el reto, tienes que seguir los siguientes pasos:
- Primero tienes que cortar por completo el uso de tus tarjetas de crédito mientras terminas de pagar tu deuda. Recuerda realizar todos tus pagos en efectivo o con tarjeta de débito, ya que en esta estrategia pedir prestado aquí para pagar allá no es una opción.
- Inserta en una hoja de cálculo los datos de todas tus tarjetas, específicamente cuánto debes en cada una y a qué tasa de interés estás pagando. Esto te permitirá identificar qué tarjeta tiene la tasa de interés más alta y será la primera que deberás liquidar, a la cual llamaremos tarjeta objetivo.
- Si tienes dos o más plásticos a pagar, salda el pago mínimo en todas las tarjetas que tengas, con excepción de la tarjeta objetivo.
- Asigna la cantidad más grande que puedas para la tarjeta objetivo. Idealmente debe ser mayor al pago mínimo, pero que también te permita pagar con otros plásticos y mantener otros gastos al día.
¡Apriétate el cinturón! pero no exageres o podrías volver a aplicar el tarjetazo. - Repite este proceso mes a mes hasta liquidar las deudas de tu tarjeta objetivo.
- Una vez liquidada tu tarjeta objetivo, la tarjeta con la tasa más alta que aún tenga saldo se volverá tu nueva tarjeta objetivo.
- Repite estos pasos hasta terminar de liquidar todas tus tarjetas.
2. Método Bola de Nieve
Este método puede considerarse una versión light del Método de la Avalancha, debido a que sigues los mismos pasos pero enfocándote en la tarjeta de crédito con la menor deuda, con la intención de comenzar a ver tarjetas liquidadas más rápido y mantenernos motivados en nuestra estrategia.
Sin embargo, este plan implica un mayor costo, debido a que deja que las deudas con la mayor tasa de interés continúen creciendo. Por ello el Método de la Avalancha suele ser lo más recomendable si quieres pagar menos intereses, pero si estás dispuesto a asumir este costo, bien puede ser tu opción.
Cómo REDUCIR el pago de intereses de tu Tarjeta de Crédito
3. Planes de pagos fijos o transferencia de saldos
Una tercera opción es pagar tu deuda en un esquema de pagos fijos, ya sea con tu banco o con otro que te ofrezca mejores condiciones.
En este tipo de planes, la tasa suele ser significativamente menor a la que pagas de manera estándar en tu tarjeta.
¿Qué beneficios trae esto? Bueno, es como ponerle un freno a tu adeudo para evitar que siga creciendo y planeas tus mensualidades. De esa forma te permitirá tener una mejor planeación de tus finanzas personales.
Si quieres llevar a cabo este plan, una estrategia es llamar a tu banco y decirles que otra institución te ha ofrecido transferir tu deuda a un plan de pagos fijos con tasas más bajas. Usualmente el banco aceptará y te ofrecerá varios plazos para liquidar tu deuda, incluso, si no acepta tienes la opción de evaluar tus alternativas en otras instituciones financieras.
Además de buscar la tasa de interés más baja, también es recomendable que optes por plazos reducidos, ya que ocurre algo similar que en los métodos explicados arriba: a mayor tiempo, más intereses pagarás, por lo que buscar las menores mensualidades posibles te permitirá ahorrar dinero en intereses.
4. Préstamo Personal o de Nómina
Aquí sí se vale pedir un crédito para pagar otro, pero ¡cuidado! hay varios rubros que debes evaluar antes.
Primero debes buscar un financiamiento con tasas inferiores a las que ya pagas en tu tarjeta de crédito. Los créditos de nómina suelen ser una buena opción, ya que su costo suele ser menor al que representa las tarjetas. Por ejemplo, en el segundo trimestre del año la tasa promedio de los créditos de nómina era 24.8%, mientras que el de las tarjetas era 37.2%, según datos de Banxico.
Los créditos de nómina tienen mejores condiciones cuando se solicitan con el banco que alberga nuestra nómina, por lo que puedes preguntar por las opciones disponibles. Otra opción pueden ser los préstamos personales, pero tienes que cuidar que la tasa no sea mayor que la de las tarjetas.
En este caso, según datos de Banxico, la tasa promedio de estos préstamos era de 39.8%, por lo que optar por esta alternativa habría salido más caro. Aquí la recomendación es verificar que la tasa de interés sea menor al que pagas en tu tarjeta de crédito.
Si estás pensado en optar por esta alternativa para liquidar tus deudas, te recomendamos:
- Al igual que con los otros métodos, es fundamental que dejes de utilizar tus tarjetas y comiences a pagar sólo con efectivo o débito hasta que la situación se resuelva.
- Opta por un plazo cómodo, pero que a la vez te permita pagar tus tarjetas lo antes posible. Recuerda que a menos mensualidades, más bajos serán los intereses que pagarás.
- No lo pienses: en cuanto recibas el préstamo deposítalo para liquidar tus tarjetas de crédito. Si lo gastas, sólo te sumarás más problemas.
- Si te autorizan un monto grande, aprovecha para consolidar todas tus deudas y apégate al plan de pagos fijos. Recuerda: no solicitar más créditos.
¿Qué puedes hacer si ya no tengo dinero para pagar mi tarjeta?
Si has dejado de pagar por más de 90 días se considera una situación de impago, pero no por ello debes abandonar el problema, ya que dejar crecer tus deudas hará que el problema permanezca en tu historial crediticio, y te impedirá acceder a otros créditos como el automotriz o incluso una hipoteca.
Aún puedes hacer algo para solucionarlo, ya sea por tu cuenta o con la ayuda de los expertos, por eso te diremos cómo negociar deuda de tu tarjeta de crédito con la ayuda de las reparadoras de crédito.
¿Cómo funcionan las reparadoras de crédito?
Las reparadoras son empresas privadas que fungen como intermediarios entre los deudores y los bancos. El objetivo de este tipo de instituciones es negociar una reducción de los montos adeudados –o quita– hasta por 70% del monto original. Estas empresas atienden exclusivamente a personas que han caído en una situación de impago y que adeudan más de 35,000 pesos.
Aunque esta alternativa suena sumamente atractiva debería ser una de tus últimas opciones, ya que significa que has dejado de pagar. Si aún estás pagando tu crédito, te invitamos a elegir alguna de las primeras opciones mencionadas.
Si eliges a una reparadora de crédito, debes tener en cuenta dos cosas: tienen un costo (por administración mensual y sobre la cantidad que te ahorren con el banco), y dejará una marca en tu historial crediticio de hasta seis años a partir de que pagues el crédito.
¿Cómo negociar una deuda con tu tarjeta de crédito?
Lo que hace una reparadora es crear con el deudor un plan de pagos con cantidades mensuales que sean cómodas para el pagador, en periodos que van de seis a 24 meses. Estas aportaciones se depositan en un fideicomiso o en la cuenta de una Sociedad Financiera Popular (Sofipo), y cuando hay cantidad considerable la reparadora se acerca con el banco.
Si el banco acepta –que es en la mayoría de los casos– se finiquita la deuda. Si tienes créditos con varias instituciones este proceso se repite hasta liquidar todos los adeudos.
Algunas reparadoras pueden sugerirte dejar de pagar para caer en impago, y que puedan atenderte. Esto es muy poco recomendable, principalmente por la marca que dejará en tu historial crediticio, que podría permanecer hasta por seis años.
También considera que estas empresas no están reguladas, y verifica que la cuenta donde depositas tus mensualidades está a nombre de una empresa, además de que se requiera de tu autorización para que el dinero sea retirado.
Por último, asegúrate de que te será entregado un comprobante de que tu deuda se eliminó, para que lo puedas utilizar por si el préstamo aparece activo en tu historial crediticio.
¿Cómo evitar una recaída?
Para evitar repetir la pesadilla, es recomendable que conozcas a fondo tu tarjeta de crédito: cuándo es tu fecha de corte y tu fecha de pago, y a qué tasas de interés te enfrentas si te atrasas con tus obligaciones mensuales.
Además, es recomendable incluir en tu presupuesto mensual el pago de tus tarjetas, junto a otras obligaciones como el pago de servicios o de tu renta. En este registro recuerda incluir las compras a meses sin intereses, ya que de vez en cuando pueden ocasionar una mala sorpresa.
Ten cuenta tu capacidad de endeudamiento. Los expertos en finanzas personales consideran que una persona se puede endeudar mensualmente hasta por 30% de sus ingresos mensuales, una proporción que incluye todo tipo de préstamos, por lo que si ganas 10,000 pesos mensuales, el pago de todos tus créditos no debería superar los 3,000 pesos.
COMENTARIOS